Kirk W. W.

Kirk W. W.

Datos Biográficos

Mi nacimiento y primeros ocho años los pasé en la gélida, boscosa Minnesota de los grandes lagos.

De mi madre sólo diré que se pegó un tiro con una escopeta en el pecho siendo yo de 5 años de edad.

A los 8 añitos (1958) nos subimos mi padre, mi 3ª madre-o segunda madrastra, sus 4 hijitos además de mi hermano Owen, 15 meses mayor que yo, al S.S. Constitution. En el 1959, creo, Ernest Hemingway lo tomó, al parecer, a Barcelona, como nosotros. La mitad más grande de la familia retornó a EEUU pues “en España no hay médicos”, alegaba ella, pues se fue con una futura hermana a la que nunca he conocido. Así que quedamos el inseparable trío: Mi padre y los 2 hermanos.

Pronto nos ubicamos en la soleada, desértica Almería. El cambio fue no poco interesante, créanme.

Mi padre se casó con una joven española de 20 años, de la que tras varios fracasos nacerían 4 hermanitos (nuevamente 3 niñas y un niño). Pero antes de eso viajamos 1 año a la India (Kerala, al suroeste, y oficialmente la provincia más pobre del país). No tuve tiempo para aprender Hindi, Malayalam y Tamil… ¡Magna empresa cortada de raiz!

De vuelta a Europa, unos 8 meses en Italia, luego Suiza, Francia (3 ó 4 veces), y a estudiar bachillerato: el antiguo franquista, con elemental y superior, PREU y toda la pesca.

Andaría el año 1970-71 cuando me trasladé

a Granada a continuar los estudios, pues Almería no gozaba de universidad.

Dejaré que el libro desarrolle los demás detalles, incluida mi vuelta de 10 años a los Estados Unidos, y mi estancia en U.C. Berkeley, CA, pues están todos ahí; al menos los de los frecuentes agujeros o lapsos de memoria (Eng: ‘Blackouts’), que tuve en  abundancia, no me han arrebatado para siempre.

Naturalmente nunca conviene aburrir al lector, falto siempre de tiempo, y trataré de comprimir en el libro al máximo los muchos eventos y más sufrires, sabiendo que el tema se las trae y no es de los bocados más gustosos de digerir…  borracheras, resaconas de esas que acabas en el hospital, o en un centro de desintoxicación, rehabilitación, etc.; consecuencias a cual más deleznables.  Si algo de historia de amor tiene, es amor desesperado a  un simple elemento químico.

¡Cuánto sentimiento he causado!



   

Alcohol

Confesiones


     No es un libro de referencia, auto-ayuda ni un compendioso ensayo psicológico sobre un problema acuciantemente actual.

     A través de los años lo he probado TODO, y he aprendido mucho, mucho, de lo que es el alcoholismo.

Pero no aprendí hasta hace 6 años lo que es la libertad de ese líquido mortal

     Todos estos conocimientos se los presento aquí en un castellano claro y conciso, sin ambajes ni malabarismos. Créanme: no lo hago por ningún afán de lucro pues nada gano. Lo hago porque a mí me han ayudado, y lo único que quiero hacer es devolver, en la medida en que puedo,  esa enorme deuda.

Gracias y suerte ysobrevive.